EL TORNO

Tan versátil y útil que no podía dejar más tiempo sin hablar de la herramienta por excelencia en mecanizado: El Torno. (véase definición, fuente: Wikipedia)

Desde su llegada a este mundo, junto con su gran compañera de batalla la fresadora, el torno ha sido, es y será una de las maquinarias más útiles y de mayor ayuda en la fabricación de todo tipo de piezas de materiales diversos. Muchísimo antes que la fresadora, el torno ya se utilizaba en la cultura egipcia por el 850 a.c., aunque rudimentario por aquel entonces, ofrecía a su operario una forma más fácil y rápida de trabajar materiales. Hoy en día tenemos la tecnología suficiente para que sean totalmente automáticos y tan solo tengamos que darles el material a mecanizar junto con una serie de parámetros que él trasforma en una pieza real que tendrá las especificaciones que el fabricante y el cliente final deseen.

El torno es una máquina – herramienta originalmente concebida para obtener superficies de revolución que son aquellas que se generan por el desplazamiento de una recta llamada generatriz, siguiendo una trayectoria circular llamada directriz, según un determinado eje de simetría.

Su movimiento principal es de rotación, lo posee la pieza a mecanizar, y emplea una herramienta de filo único para la eliminación del material. Permite obtener buenos grados de acabado, si la elección de las condiciones de corte se realiza adecuadamente. Y permite asimismo la obtención de superficies planas perpendiculares al eje de rotación de la pieza.

Se distinguen tres tipos de movimientos, como en la mayoría de las máquinas – herramientas, el principal lo realiza la pieza que gira sobre su eje realizando un movimiento de rotación denominado movimiento de trabajo. Además al ser atacada por la herramienta de corte realiza dos tipos más de movimientos: de avance, generalmente paralelo al eje de la pieza, que es quien define el perfil de revolución a mecanizar; y de penetración, perpendicular al anterior, que es el que determina la sección o profundidad de viruta a extraer. Con estos tres movimientos y la destreza de un operario cualificado pueden mecanizarse una infinidad de piezas o partes de ellas.

En EMA Competición enseñamos los principios para comenzar desde cero a utilizarlo, junto a una base teórica, en las clases de Mecanizado explico en diversas prácticas que realizan mis alumnos, cómo confeccionar diferentes tipos de piezas de la forma más eficiente posible. Contamos con un torno de mesa con el que se pueden fabricar numerosas piezas (casquillos, arandelas y demás), que nuestros alumnos montan después en las diferentes partes de las motocicletas que están a nuestra disposición.

Un ejemplo claro de destreza puede verse en una de las fotografías que se adjunta. En ella puede verse como se ha creado un “trompo” a partir de un tocho de hierro. Sin límites, tú eres el único que los crea, dale rienda suelta a la creatividad y sé libre de ataduras. Sólo con práctica lo lograrás.

Hasta el siguiente post.

Fdo. Tony Zambrana

Profesor de Mecanizado